1. Lección: Agradecimiento es una nota del alma que produce el mejor concierto en el
espíritu.
2. Texto: “Y la paz de Dios gobierne en vuestros corazones, a la que asimismo
fuisteis llamados en un solo cuerpo; y sed agradecidos.” Col 3:15
3. Ilustración: Agradece a:
Aquellos que desde su manera de ser, te ayudaron a ser más humano, más sencillo, más sensible a las cosas de Dios.
Aquellos que desde su manera de ser, te ayudaron a ser más humano, más sencillo, más sensible a las cosas de Dios.
Aquel que inesperado y oportuno supo escucharte comprensivo.
Aquellos con quienes compartiste tus ratos de
juego.
Aquel que te ayuda a revelar tu riqueza interior.
Aquel que con su gran bondad te hizo ser sencillo.
Aquel que descubriste un día y “se quedó en ti”.
Aquel que corrigiéndote con cariño te hizo caminar.
Aquel que con su vida incansable te animó a luchar.
Aquel que sin cansancio siempre esperó lo mejor de
ti.
Aquel que te exigía siempre haciéndote crecer en la
grandeza.
Aquel que te hace sentir importante cuando necesita
de ti.
Aquel que estando lejos lo sentiste cerca.
Aquel que con su desacuerdo te hace descubrir tu
verdad.
Aquel que sabes que te quiere y siempre te espera.
Aquel que siempre te anima a ver lo positivo.
Aquel que te quiere como eres animándote a crecer.
Aquel que con su necesidad de ti hizo que te
sintieras “único”
Aquellos que con su experiencia interior te
ayudaron a conocer a Dios y te anunciaron la buena noticia de que:
DIOS ES TU MEJOR AMIGO Y TE AMA.
4.
Aplicación:
Ahora también es el momento de tener un recuerdo agradecido.
Son muchos quienes a lo largo del año pasado han
dejado su huella en ti.
Experiencias sobre las que puedes recordar nombres. Quizá algunos te hayan
lanzado a una aventura para sacar algo de ti y despertar tu “yo dormido”,
conseguir aquello que te parecía imposible, cambiar, crecer y madurar.
Descubrir en ti las huellas de “otros amigos”
encontrados a lo largo del camino, todo esto motivo de alegría y gratitud. Es
motivo de gratitud el que hayas podido experimentar a Dios, creer en la vida y
en tu capacidad de encuentro, creer que alguien haya podido ayudarte a
descubrir lo mejor que existe dentro de ti.
Pr. Wilbert Maluquish